martes, 4 de julio de 2017

Ingredientes para conseguir delincuentes jóvenes:

Receta global al estilo Master Chef, ya que tenemos este programita mundial que pareciera enseñarnos algo de cocina, y en realidad se parece más a una telenovela que a un programa de cocina (monitores que rebajan y desprecian a los que cocinan, llantos, ofensas, sensación generalizada de fracaso, mientras parecen jugarse la vida cocinando un plato que será deglutido de forma soez por monitores con mueca de disgusto permanente, o si no ha salido bien, hasta capaces de tirar la comida a la basura).

Ingredientes para conseguir delincuentes jóvenes:
-Tener gobiernos que hacen la vista gorda, desde hace muchas décadas, con la corrupción interna y la del partido opositor, ya que entre ellos han hecho negocios turbios desde siempre.
-Que a los corruptos, no les interese mostrar la riqueza, sabiendo que ellos se salvarán o de lo contrario hablarán y se llevarán a otros peces gordos con ellos.
-Que ya no les importe el futuro de las nuevas generaciones (como tampoco el resto de la población, dado que han hecho carrera política solo para tener ellos y los suyos privilegios).
-Que la casta que gobierna, dado que no se han formado con carreras humanistas, (a lo sumo son mediocres abogados porque necesitan conocer la ley para quedar impunes), desprecien la educación y la formación pública de jóvenes procedentes de hogares humildes y desestructurados), aunque a los suyos los envían por lo general a colegios privados de alta calidad y universidades con posgrados y másteres incluidos como postre.

-Importante aderezar toda esta ensalada con mensajes globales que apuntan sólo al éxito, a la banalidad y vulgaridad general, aquí, en cierta medida, participamos casi todos lamentablemente.
-Jóvenes que no encuentran un futuro que los incluya y un Estado que los proteja.

Esta forma nueva de delincuencia, se ve desde hace años en latinoamérica y pareciera que se ha exportado a occidente, dado que el caldo de cultivo es el mismo y no podía ser de otro modo, ya que este desdén por nuestras culturas y valores en manos de quienes ostentan cierto poder, ya no se sienten responsables de transmitir un legado que mejore nuestras sociedades. 

lunes, 3 de julio de 2017

El vacío insoportable

Dado que el hedor de la corrupción sigue cotidianamente metiéndose por nuestros poros y que, en estos últimos tiempos, lo que ustedes han aprendido, es contratar los mejores bufetes de abogados para que los defiendan como aquellos legionarios romanos, sabiendo que la ley no es igual para todos, y que siguen metiendo presos a los ladrones de gallinas, mientras vemos como prescriben las causas por corrupción, por argucias y tecnicismos, vuelvo a editar este pequeño párrafo que he publicado hace unos años, para decirles que nosotros (somos la inmensa mayoría), también hemos aprendido, a no tenerles mas confianza, ni respeto alguno, ni a movernos un milímetro de nuestras convicciones.

El vacío insoportable

Él se prepara para salir de casa, revisa dos veces que la alarma quedó conectada, se adelanta a sacar el coche del garaje y sube su mujer y su pequeña hija.
En llegar a destino tarda 10 minutos como todos los domingos, luego vendrá lo bueno, una buena comida en el restaurante que ya se adelantó a reservar mesa el viernes su secretaria.
Está correctamente bien vestido, contento de la apariencia de su imagen y la de su mujer. Se encaminan a la entrada de la iglesia, -le gusta llegar sobre la hora, para ver desde atrás quiénes y dónde están sentados sus amiguetes y aquellos que él conoce bien-, y se encaminan hacia los primeros asientos libres. Aparece el cura para dar misa y todos se preparan para la liturgia.
La imagen de su rostro se enfría y la seriedad se apodera de él, mira la imagen de Cristo en la cruz con rostro serio y pensativo, muy pensativo, como reflexionando sobre lo insípida y fugaz que es la vida.
Todos los políticos corruptos tienen fascinación con las imágenes católicas y la trascendencia del alma. Lo que trata de olvidar por un momento es que es él quien lleva una vida insípida y de engaño, de mentira y banalidad, tan espuria como volátil.
Por la noche, se tomará un par de copas de whisky para poder conciliar un sueño sin principios, ni dignidad ni fe.
Dedicado a los cientos de corruptos que aun andan sueltos.

Foto publicada en Facebook, desconozco el autor  de esta fantástica foto.